3. Directrices

1. Tener en cuenta que todos tenemos diferentes formas de percibir la información.
2. Elegir el mejor formato para la información.  Por ejemplo, para algunas personas la información con imágenes o sonidos puede ser mejor que la información escrita.
3. Usar siempre el lenguaje más adecuado  para las personas a las que va dirigida tu información. Por ejemplo, no usar lenguaje infantil cuando tu información es para adultos.
4. Considerar que es posible que las personas que van a usar tu información no sepan mucho del tema. Asegúrate de explicarlo claramente y también todas las palabras difíciles relacionadas con él.
Las palabras poco comunes deben  ser:
  1. Evitadas
  2. Ejemplificadas
  3. Explicadas