Orientaciones metodológicas

En cada actividad se explicitan objetivos, se sugiere el tiempo y modalidades de trabajo, se dan orientaciones al tutor (se menciona el propósito de la tarea, se realizan aclaraciones sobre la actividad y el contenido a enseñar, además de explicitar las operaciones implicadas), se describe la consigna y se cierra con una autoevaluación a partir de la pregunta Qué aprendí en la que se orienta al alumno para que conceptualice lo aprendido y reflexione sobre los procesos involucrados en la tarea.

Las actividades están secuenciadas en forma flexible, recurrente y recursiva para que se pueda atender la diversidad de aprendizajes, de tal manera que el tutor pueda elegir las actividades según el grado de dificultad en los aprendizajes de los alumnos.

Las actividades de lectura, la escritura y los conocimientos gramaticales se presentan en forma gradual e integrada a fin de promover la aplicación de los distintos saberes. En relación con la evaluación, las actividades implican un saber hacer por parte del alumno que es evaluado al llevar a cabo la tarea. No obstante esto, se presentan además actividades específicas de evaluación para promover la reflexión y el control de los procesos desarrollados y los contenidos aprendidos. Cada actividad finaliza con la reflexión lingüística y cognitiva de lo aprendido para orientar al alumno en su propia conceptualización.